.

  • Deficiencia de vitamina A (retinolismolosis): ceguera nocturna, sequedad en los ojos (membrana conjuntiva) y en la piel y afecciones diversas de las mucosas. En cambio, el exceso de esta vitamina produce trastornos, como alteraciones óseas blancas y negras, o incluso inflamaciones y hemorragias en diversos tejidos.